Securmática 2018: Ciberseguridad, el ADN de la transformación
El avance en las capacidades explotables de las tecnologías y los sistemas informáticos y de comunicaciones constituye el motor principal que está propulsando nuestra sociedad hacia un futuro disruptivo, en el que la hiperconectividad -que facilita la interacción entre personas, cosas y objetos digitales-, la automatización en todo frente y la aplicación de técnicas de inteligencia artificial que pueden operar y cooperar en todas las escalas, van dibujando un escenario sin vuelta atrás cuyo análisis preocupa a los expertos en gestión de riesgos globales.
Sencillamente: si no se acompasa el apuntalamiento de los procesos de actividad y negocio vigentes con controles de ciberseguridad y de respeto por la privacidad, y si los de nueva creación no cuentan con ellos en origen, difícilmente podremos empezar a usar con propiedad el término resiliencia, más aún en un sistema de relaciones en el que las interdependencias crecen y se enmarañan.
Es, por tanto, un momento apasionante para los profesionales de la gestión de riesgos de ciberseguridad, cuya evidente sobrecarga de trabajo crece en igual medida a su valoración en el mercado.
En esta XXIX edición, a celebrarse los días 24, 25 y 26 de abril en Madrid, Securmática propone un programa realista, cuyo contenido se centra en lo que, a través de proyectos y otras iniciativas, las organizaciones, los CISOs que en ellas prestan sus servicios y los proveedores especializados, están acometiendo en los dos frentes antes aludidos: el “parcheo” de lo heredado y el diseño de lo nuevo.
Se ha programado también un debate, acorde con el momento de madurez y grado de responsabilidad que asumen los gestores de la ciberseguridad en empresas, con la vista puesta en la legislación y normativa vigente y en la por venir. En dicho debate se discutirá si procede o no que este colectivo pujante se organice para defender los intereses profesionales de su función, sobre la que se ciernen expectativas regulatorias.